jueves, junio 30, 2005

Resto del mundo

El martes me conecté en casa al MSN y estaba el Negro del otro lado del mundo, en China. Hablamos bastante. Su voz salía por el parlante y yo hacía comentarios escritos. Estuvo buena la experiencia comunicativa y obvio, esuchar su voz y conocer sus experiencias. Prometí comprarme un micrófono.

Ayer llamé a Laura a Madrid. Es increíble como se le pegó el acento español y también palabras que se usan mucho allá. Ella está bien y está haciendo un montón de cosas, pero claro, extraña sus pagos, sus amigos, sus lugares, sus recuerdos. En enero la tendremos por aquí.

Hoy a la mañana, al enterarme de una demora de media hora del micro que me trae a la oficina, aproveché para llamar a Hernán, mi hermano. El muy caradura estaba en la playa tomando cerveza y sol. Barcelona (según sus relatos) es alucinante en verano y desbordan las actividades. Para profundizar la imagen y su recuerdo, cuando llegué a la oficina, puse el CD que me grabó con sus temas electrónicos, Fonograma.