sábado, diciembre 16, 2006

diarios viejos

11 de mayo de 2006

Hoy, después de mucho tiempo, sentí más ganas de abrazar a una mujer que de cogerla. No estaba a mí lado. Fue una sensación del momento. Nos estamos conociendo. Todavía ni un beso. Pero la atracción va más allá de lo sexual, como me venía sucediendo, y es raro. Un poco de tontera, pero no mucha. Ni siquiera me atrevo a decir que me estoy enamorando, ni nada parecido. Si desapareciera ahora mismo, supongo que no me afectaría, y sería una historia muerta que no pudo ser, pero no un pesar. Igualmente, la tontera está. La vi tres veces. Todos encuentros fugaces en la facultad. Uno más lindo que el otro. No puedo dejar de mirarla a los ojos. Ella tampoco. Sonrío como un idiota. Ahora que veo el tono, este diario va a terminar siendo, indefectiblemente, el diario de un yo en pleno devenir. Cuando estoy por mutar el cuerpo me pide la escritura.