jueves, octubre 20, 2005

Diarios viejos

Martes, 29 de Junio de 2004
por la tarde

Hice el trámite para la simultaneidad con Edición. Ahora soy estudiante doble. Hace una semana había hablado con el tipo que me tenía que firmar la libreta. Fue muy gracioso porque yo no sabía quién era y hoy cuando lo vi, lo supe. En las inscripciones este tipo se pelea con otro por cantar los nombres de los estudiantes que tienen que retirar el comprobante de inscripción. Y encima este otro, que es más viejo, tiene la voz como tomada y habla muy bajo. Es cómico. El otro lo mira como diciendo “que se calle este viejo”. Los dos quieren tener protagonismo. Y hoy cuando pregunté por el encargado de las simultaneidades el viejo me señaló al otro de manera despectiva, porque no iba a formar parte del trámite. Es más, mientras uno me firmaba la libreta, el otro miraba receloso. Me reí mucho, para adentro.
Mientras escribo siento que hoy ya escribí. Todo el tiempo me parece que pienso en función del diario, o mis pensamientos tienen la manía de querer ser escritos, o todo el tiempo pienso en lo que hice para escribirlo. Esto ya lo escribí. Y escribí más, pero ahora no tengo tiempo. Tal vez a la noche.