martes, junio 07, 2005

Diarios viejos

Miércoles 04 de Agosto de 2004
por la mañana

Ahora estoy en el micro.
Estoy triste. Triste como no estaba hace mucho.
Frente a un espejo imaginario: tengo el rostro curtido, el gesto serio y grave. Mis 23 años parecen 40. Me cuesta reír. Me cuesta disfrutar. No me cuesta llorar. Me cuesta ser yo.
Antes era distinto: era más ingenuo o más optimista. Soñaba más. Tenía más proyectos.
Ahora es todo gris oscuro o blanco. Blanco de vacío y negro de oscuridad.
Para esto mejor un poema. Pero ahora no.