viernes, noviembre 25, 2005

jueves, la noche

terminé de hacer unos trámites en el centro y fui a la facultad a anotarme a los finales. Después, presencié la concurrida discusión sobre blogs, literatura e internet. Tuvo sus puntos interesantes, pero no fue para nada iluminadora. Podría haber estado presente Link, que tiene ideas más conceptuales y teóricas sobre el tema. Lo que más llama la atención es que todavía, relacionamos la palabra libro con un objeto rectangular con tapas y hojas, y nos cuesta pensar en otras posibilidades, o al menos, desmerecemos a los otros formatos. Hay una cuestión cultural muy grande. El libro (el de papel) como fetiche. El objeto y sus significaciones. Le vi la cara a tres bloggers que leo: Juan Terranova, Santiago Llach y Juan Incardona.

Después, fui a Konex, donde estaba Try Japan 2005, un festival de cultura japonesa. No fue el día indicado para ir porque el programa del día era aburrido. Pero igual estuvo bien. Algunos de los chicos se fueron y yo me quedé un rato más con santiago. Nos fuimos y estuvimos dos horas recorriendo Buenos Aires en auto, mientras charlábamos y escuchábamos música. Abasto, Palermo, Once, Constitución, Microcentro, Belgrano, Las Cañitas, Saavedra, etc. Pasamos como cinco veces por delante del Obelisco. Realmente es hermosa Buenos Aires de noche con sus luces. Y además, todo su folclore de personajes de la noche: cartoneros, putas, travestis, putos, chorros, policias, parejas, borrachos, vagabundos, etc.


libro.
(Del lat. liber, libri).
1. m. Conjunto de muchas hojas de papel u otro material semejante que, encuadernadas, forman un volumen.
2. m. Obra científica, literaria o de cualquier otra índole con extensión suficiente para formar volumen, que puede aparecer impresa o en otro soporte. Voy a escribir un libro. La editorial presentará el atlas en forma de libro electrónico.

Diccionario de la Real Academia